El programa de vivienda contempla un millón de casas nuevas y un enfoque en mujeres jefas de familia, indígenas y jóvenes.
En su tradicional conferencia matutina, la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, detalló el plan de vivienda que implementará durante su administración para el periodo 2024-2030. Bajo la dirección de Elena Edna Vega, titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), este programa busca atender de manera integral el rezago habitacional en México y beneficiar a los sectores más vulnerables de la sociedad.
Inversión histórica para reducir el rezago habitacional
El Programa de Vivienda y Regularización contará con una inversión aproximada de 600 mil millones de pesos, orientados a la construcción de un millón de nuevas viviendas. Esta iniciativa se enfoca principalmente en mujeres jefas de familia, jóvenes, personas indígenas, adultos mayores y aquellos que viven en situación de renta. Con este esfuerzo, el gobierno busca brindar acceso a un hogar digno y seguro para distintos grupos de la población.
Según lo expuesto durante la conferencia, 500 mil viviendas estarán dirigidas a ciudadanos que no cuentan con seguridad social, mientras que las otras 500 mil serán para los derechohabientes de los principales sistemas de seguridad social. Con estas medidas, se espera reducir significativamente el rezago habitacional, que afecta a millones de mexicanos.
Ubicación estratégica y servicios esenciales
El plan de vivienda también pone énfasis en la ubicación de los nuevos desarrollos habitacionales. Las viviendas estarán situadas en zonas estratégicas con fácil acceso a servicios de salud, educación, cultura y comercio. Además, estarán equipadas con los servicios básicos de bienestar como agua potable, drenaje y electricidad, garantizando una mejor calidad de vida para los futuros residentes.
Renta social y opciones de propiedad
Elena Edna Vega, titular de SEDATU, explicó que el programa no solo contempla la construcción de viviendas para compra, sino que también incluye opciones de renta social y alquiler con opción a compra. De acuerdo con el plan, en 2025 se prevé la entrega de aproximadamente 165 mil viviendas, junto con 120 mil escrituras, para consolidar la seguridad patrimonial de las familias beneficiarias.
Atención a sectores más vulnerables
El programa de vivienda tiene como prioridad atender a las poblaciones más desfavorecidas, enfocándose en zonas con altos niveles de marginación, riesgo de desastres naturales y altos índices de inseguridad. Se dará especial atención a las necesidades habitacionales de las comunidades indígenas y de aquellos municipios afectados por proyectos prioritarios del gobierno. Entre los grupos que recibirán apoyo destacan:
- Población vulnerable en general.
- Familias en zonas de alto riesgo.
- Municipios con necesidades de vivienda debido a proyectos prioritarios.
- Comunidades indígenas y rurales.
- Poblaciones con crecimiento demográfico acelerado.
Colaboración interinstitucional para lograr los objetivos
El proyecto, aunque aún en fase de planeación, cuenta con la colaboración de instituciones clave como la Comisión Nacional de Vivienda (CONAVI), el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (INFONAVIT) y SEDATU. Este esfuerzo interinstitucional contempla, además de la construcción de viviendas, la mejora y ampliación de cerca de 450 mil hogares, así como la implementación de un amplio programa de escrituración para regularizar la situación legal de los inmuebles.
Características de las nuevas viviendas
Las viviendas construidas en el marco de este programa se desarrollarán bajo estrictos criterios de seguridad y sostenibilidad, priorizando la calidad de vida de sus habitantes. Las principales características de estos inmuebles incluyen:
- No se ubicarán en zonas de riesgo (como pendientes pronunciadas, áreas propensas a inundaciones o cerca de fallas geológicas).
- Contarán con todos los servicios básicos: agua potable, drenaje y electricidad.
- Estarán cerca de centros educativos, de salud, y zonas de recreación y cultura.
- Tendrán acceso a vialidades primarias y secundarias.
- Incluirán áreas verdes y espacios recreativos.
- Estarán diseñadas de acuerdo a las características familiares, culturales y contextuales de cada región.
Distribución regional de las viviendas
La construcción de las viviendas se realizará en todo el país, con un enfoque regional que asegure una cobertura equitativa. La distribución proyectada es la siguiente:
- Región Sur: 325,000 viviendas en Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Veracruz, Tabasco, Campeche, Quintana Roo y Yucatán.
- Región Centro: 239,400 viviendas en Ciudad de México, Estado de México, Morelos, Puebla, Tlaxcala, Hidalgo, Querétaro y Guanajuato.
- Región Centro-Norte: 228,800 viviendas en Jalisco, Michoacán, Colima, Nayarit, Aguascalientes, Zacatecas, San Luis Potosí, Durango, Sinaloa y Baja California Sur.
- Región Norte: 206,800 viviendas en Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas.
Este proyecto de vivienda pretende no solo solucionar el problema del rezago habitacional, sino también impulsar el crecimiento económico en las diferentes regiones del país, creando empleos y mejorando la infraestructura.
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